Historia antigua

La actual Archicofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Sangre, Santo Cristo Verde y Nuestra Señora de la Santa Vera Cruz, conocida popularmente como “Cofradía de los Estudiantes”, es el resultado de las fusiones que a lo largo de más de cuatrocientos años se han ido produciendo. Esta Archicofradía está constituida por la Cofradía de la Vera Cruz (1525-1530), la Hermandad de Flagelantes de la Preciosísima Sangre de Nuestro Redentor Jesucristo (primera mitad del Siglo XVI) y la Cofradía del Santo Crucifijo (primer tercio del Siglo XVII).

A tenor de Real Cédula dada en Granada a 18 de Septiembre de 1500, los Reyes Católicos concedían licencia a la Ciudad de Antequera para que esta cediera 700 varas de terreno en las que poder labrar un Monasterio bajo la advocación de San Zoilo, por los Frailes de la Observancia de San Francisco. Daban así cumplimiento a los deseos del Infante Don Juan, el cual en el testamento que otorgó en Salamanca en 1497, mandó por medio de legado la suma de 340.000 maravedíes para tal fin. Por su parte los Reyes Católicos aportaron para la obra 600.000 maravedíes.

El primer Convento de Religiosos que se edificó y fundó en esta Ciudad de Antequera fue el de los Religiosos del Seráfico Padre de San Francisco. La fábrica del Convento comenzó en el año 1501, en los arrabales de la Ciudad, en un lugar ocupado por una antigua Ermita dedicada igualmente al Mártir San Zoilo, abogado de los males del riñón, concluyendo las obras hacia 1515. A partir de este momento debemos empezar a encuadrar la fundación de la actual Cofradía. Sin embargo, van a pasar varios años en los que existen fusiones de distintas Cofradías y Hermandades hasta llegar a lo que hoy se conoce como la Archicofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Sangre, Santo Cristo Verde y Nuestra Señora de la Santa Vera Cruz.

Los Franciscanos Observantes potencian todo lo relacionado a la devoción de la Pasión de Cristo y hacia la Santa Cruz; allá donde se funda un Convento de Franciscanos se instituía una Cofradía encargada de adorar a la Verdadera Cruz.

No conocemos con certeza la fecha exacta de fundación de la Antigua Cofradía de la Vera Cruz en Antequera. La primera referencia documental que tenemos aparece en las Ordenanzas Municipales, redactadas en 1530 y confirmadas por el Emperador Carlos en el 1531, a través de una Real Provisión otorgada en Ávila.

En el Capítulo de estas Ordenanzas denominado, en el apartado<<La Horden que se a de tener al Día de la Fiesta del Santo Sacramento y como an dyr los Oficios>> dedicado a las Cofradías hace una relación por orden de antigüedad de las existentes. y En su folio 3r nos aparece: …<<La Cofradía de la Santísima Imagen de nuestra Sennora su Cruz después desto. La Cofradía de la Vera Cruz…>>. Este dato es importantísimo a la hora de barajar una fecha aproximada de la fundación de la Cofradía, ya que sabemos que la Cofradía de San Miguel se funda en 1525, por lo que cercano a este período debió de crearse nuestra Cofradía y por supuesto antes de 1530, fecha en la que se redactan las citadas Ordenanzas Municipales.

El Canónigo Francisco Barrero Baquerizo, en su historia manuscrita sobre nuestra Ciudad, hace referencia a estas Ordenanzas y en el Folio 318r. dice refiriéndose a estas Ordenanzas y a su aprobación por el Emperador: “ … las quales confirmó el Emperador Carlos Quinto y su madre la Reyna Dª. Joana en dies de julio de 1531 años la qual aprovasion fue en tiempo del Papa Paulo Tercero, de quien fue nuestro patrio Don Luis de Torres secretario, y este Pontífice entró en la Santa Silla en el año de 1534, con que se manifiesta la antigüedad de dichas trece Cofradías y de no aver mas en Antequera y de ellas presente oy no subsisten más que la del Smo. que es la de Stª María, la de San Miguel, la de la Vera Chrus, que es la de la Sangre y la de las Animas …”. Queda por tanto acreditada la veracidad de los datos sobre el origen y antigüedad de la Cofradía Penitencial, pionera en Antequera.

Además del culto a la Vera Cruz, otro aspecto de la Pasión de Cristo que potencia la Orden Franciscana de la Regla de la Observancia es la veneración a su Preciosísima Sangre, y con tal nombre surgen Hermandades en toda Europa, llegando a España en el Siglo XVI.

Estas Hermandades eran de Flagelantes. Los Flagelantes surgen a raíz de las terribles epidemias de Peste Negra que asolaron Europa durante el Siglo XIII, al ser consideradas como Sectas. Estos, consideraban que las epidemias eran consecuencia de sus pecados y que el Sacramento de la Confesión y de la Penitencia no era suficiente para redimirse, estimando que sólo el dolor corporal y la penitencia del castigo a través del Flagelo, era la solución para acabar con las atrocidades que estaban viviendo. En 1349 el Papa Clemente VI prohíbe las Hermandades de Flagelantes, posteriormente San Vicente Ferrer encauza esta Secta dentro de la ortodoxia, siendo difundida por los Franciscanos de la Regla.

En Antequera surge la Hermandad de Flagelantes de la Preciosísima Sangre de Nuestro Redentor Jesucristo en la primera mitad del Siglo XVI.

El 12 de Septiembre de 1543 se une a la Cofradía de la Vera Cruz, y ese mismo año, el 1 de Noviembre los Hermanos obtienen la cesión de unos terrenos para labrar su magnífica Capilla. El 15 de Noviembre de 1543, Fray Francisco de Escobar Gircardiasi guardián del Monasterio y demás Frailes, otorgan escritura pública, con licencia del Padre Fray Alonso de Santaellan Ministro Provincial de esta provincia de Andalucía, en la que ceden unos terrenos a los pies del Templo donde poder labrar su Capilla: …<<Por quanto ahora nuevamente sea hecho e fundado e nesta casa y convento nro de la cibdad de San francº de Antequera una hermandad y cofradía de la san Vera Cruz esres de la sangre de ntro redentor la qual a cada día crece ese aumenta …>>. Labraron la Capilla, “tan hermosa y anchuriosa” como permanece hoy, donde colocaron las Insignias que se procesionaban el Jueves Santo. Tiene su Sagrario y encima de él colocada la Insignia, tan devota como es, de Jesús de la Sangre, y encima el Santo y Crucifijo de la Sangre, título de esta Capilla y Cofradía, por la que derraman sus cofrades cada Jueves Santo. Para cuya curación dispusieron en el restante del sitio que se les dio un cuerpo espacioso en que se tiene prevenido lavatorio para todos los Hermanos que quieren lavar y curar allí. Y como parecía cosa indecente que entrasen y saliesen por la Capilla y por la Iglesia, consiguieron licencia de Fray Pedro de los Ángeles para poder hacer una puerta, por donde entrasen y saliesen a su curación y lavatorio, su fecha en 20 de Diciembre de 1583.

Los Pontífices Inocencio III, Alejandro II, Anastasio IV, Alejandro III, Inocencio IV, Honorio IV, León X, Clemente VII, Paulo III y Paulo IV concedieron infinitas y grandes indulgencias a la Santa Iglesia de San Juan de Letrán en Roma. Todas las cuales recogió el Papa Paulo IV y de ellas dio Bula a la referida Iglesia el 17 de Enero de 1535. Y por concesión de Paulo IV, Marco Antonio Maphio, Arzobispo Teatino, despachó breve a esta Capilla y Cofradía, insertando en él todas las dichas indulgencias de que goza, su data en 17 de Agosto de 1555.

Tiene esta Capilla su campana aparte para todas sus funciones y misas particulares que se dicen en ella, fiestas, novenarios, como el que se hacía antiguamente todos los años por sus devotos, empezando el 12 de Mayo, que fue el que Jesús Nazareno de la Sangre hizo el prodigio y milagro del agua, con mucha solemnidad de misas y sermones.

Las primeras constituciones a que tenemos acceso son a las de 1555, que fueron redactadas por Don Rodrigo Alonso de Pinazo, los Alcaldes y Mayordomos Don Gonzalo Huéscar, Don Bartolomé Alonso y Don Juan Cuéllar, en nombre de los Diputados, Hermanos y demás Cofrades. Gracias a estas Reglas, podemos saber, que en la Cofradía existían dos clases de Hermanos: los de Luz, que portaban hachas de cera encendidas. Y los de Sangre, que cumplían con su función de disciplinantes.

También sabemos que el orden de la Procesión se iniciaba con un Crucificado que acompañaban seis hermanos de luz; a continuación, el estandarte con la Insignia de la Cofradía, que consistía en un gran Estandarte Negro con una Cruz Arbórea Roja en el centro y “ … música de Cantores, los mas et mejores que se hallaren que vayan cantando el Miserere Mei y una Trompeta tañendo de dolor …”, siguiendo a todo esto las Insignias o pasos de los Titulares, y finalizando el guión de las Cofradías que era portado por los miembros de las más nobles y linajudas familias antequeranas de la época.

Así mismo, conocemos por estas Reglas, que en la noche del Domingo de Ramos se constituía Cabildo General, de asistencia obligatoria, bajo pena de pagar como multa media libra de cera verde de castigo, a fin de que los Hermanos que hubieran tenido durante el año algunas desavenencias o disputa se perdonasen y se diesen un abrazo.

Así como concretar los detalles de la salida procesional. Igualmente estaban obligados a dar limosna para cubrir los gastos extraordinarios que durante esos días se iban a producir.

Estas Constituciones continúan con distintos apartados referidos a las normas de la Observancia por parte de la Cofradía, aprobándose el Doce de Noviembre de 1555 por Fray Bernardo, Obispo de Málaga. Es en este mismo año cuando le conceden las mismas Bulas que a la iglesia de San Juan de Letrán de Roma, anteriormente referidas.

Esta Cofradía se reconstruye canónicamente en el año 1960, datándose su fundación en 1530. La actual Cofradía es el resultado de la fusión de las siguientes Cofradías y Hermandades: Cofradía de la Santa Vera Cruz, Santa Hermandad de la Preciosísima Sangre de Nuestro Redentor Jesucristo y Cofradía del Santo Cristo Verde.

La Santa Hermandad de la Preciosísima Sangre de Nuestro Redentor Jesucristo y la Cofradía de la Santa Vera Cruz se fusionan el 1 de Noviembre de 1543.

La Cofradía del Santo Cristo Verde se fusiona con la anterior el 28 de Diciembre de 1641.