Queremos dedicar la oración de hoy a pedir por todas las personas que están en este momento de una u otra forma trabajando para que todo vuelva a la normalidad: sanitarios, personal de limpieza de los hospitales y centros de salud, transportistas, cuerpos de seguridad, etc… También pedimos al Padre que ilumine a nuestros políticos en la toma de decisiones para que sean las más adecuadas y efectivas. Te lo pedimos Señor.

Oh Divino Nazareno de la Sangre, que estás con tu belleza y hermosura convidado a que te amen, yo te doy mi corazón limpio de todo afecto terreno. Yo te ofrezco mi memoria, entendimiento y voluntad, pues no quiero ya amar del mundo las hermosuras, por ser caducas y perecederas, pues vos sois la divina fuente de donde se dimana y nace todo lo hermoso y agradable.

Oh dulce Jesús mío, consuelo de mi alma, yo te amo, venero y adoro con todo mi corazón, y con humildad te suplico que por tu purísima sangre con la cual nos redimiste y por los méritos de maría santísima mi señora y tu purísima madre, no permitas que viva ya en mí más la vanidad, ni la culpa, ni que se condene mi alma, pues fue criada a tu imagen y semejanza; y pues nos pusiste debajo del amparo de vuestra sangre, llagas y dolores como hijos tuyos, nacidos entre tus penas, compadécete de nosotros, principalmente Señor, de los que estamos orando en agradecido recuerdo de tus dolores, fatigas, y publicando a pesar del infierno ser hijos y esclavos tuyos, señalados con tus lágrimas, y marcados con tu sangre, para que en la hora de nuestra muerte nos conozcas como hijos tuyos.
AMÉN